viernes, 7 de octubre de 2011

Los japoneses van a templo a ofrecer no a pedir...



En un programa de televisión el presentador pregunta
a un grupo de empresarios japoneses:
— ¿Cuál es la diferencia entre los trabajadores
japoneses y los mexicanos?
Los japoneses cuchichearon entre sí, y luego
se levantó el jefe y dijo:
—Hemos visitado muchas empresas mexicanas
y creemos que el trabajador mexicano es
mucho más hábil; pero en el día de hoy estuvimos
en la Villa de Guadalupe y nos dimos cuenta de por qué
las relaciones entre los obreros y la empresa son
tan deficientes. Lo que vimos en la Villa es que
los dos pueblos (japoneses y mexicanos) son
iguales: les gustan las peregrinaciones, las
tamboras, los amuletos, los chistes, la fiesta, etcétera.
Pero ustedes van a los templos a pedir y a esperar, nosotros vamos a ofrecer.
De igual forma, los sindicatos mexicanos
presentan pliego de peticiones, y los sindicatos
japoneses presentan pliego de ofrecimientos.
¡Pequeña pero gran diferencia! ¿A qué me refiero
con esto? Si este año fabricamos mil autos
Datsun, y ofrecemos fabricar mil doscientos el
año entrante, ¿qué ofrece la empresa? Si tenemos
cinco por ciento de errores en la producción
y ofrecemos reducirlos a tres por ciento,
¿qué ofrece la empresa? Y sobre la base de esos
ofrecimientos, las empresas japonesas han logrado
cero por ciento de error y calidad total
just in time, justo a tiempo. Con pliego de peticiones
como hacemos nosotros eso es imposible, pedimos más días no
laborables, más vacaciones, más aguinaldo, que si es posible
nuestro cumpleaños nos lo paguen triple, etc etc etc
en fin... que nos pasamos la vida pidiendo.

1 comentario:

Anónimo dijo...

excelente!!! muy bueno aprendamos.