Viajo en un vuelo místico, quizá busque el principio de mi raza o me pierda entre la arcilla modelando mi corazón...
viernes, 4 de enero de 2013
Los reyes magos
Los Reyes Magos son tres y viven cada uno en su apartamento. Se conocieron en un parque, allá en Oriente, cuando sacaban a pasear a sus camellos por la noche. Rápidamente hicieron amistad y se pusieron a repartir paquetes juntos.
La historia de los santos monarcas está cuajada de ricas anécdotas y es muy variopinta, la Niña y la Santa María, por lo que algunos historiadores han llegado a sospechar que los hermanos Pinzones y los Reyes Magos eran las mismas personas. Lo que sí es del todo cierto es que sus majestades de oriente llegaron a tener una profunda amistad con nuestros Reyes Católicos y, desde entonces ,los Reyes Magos tanto montan, montan tanto, que los camellos están reventados, y hasta la chepa, de llevarlos todo el tiempo encima.
Los nombres de los Reyes Magos, que hasta la fecha no habían sido publicados en su totalidad, son los siguientes:
- Melchor Ángel Román Ruíz y Gómez de Cabeza de Vaca
- Gaspar Jordi Vals de Feliú y Montjuic
- Baltasar de Molunga Butu y Mandinga
El que uno de los Reyes Magos fuera negro no es pura coincidencia. Tiene su explicación: sus padres también lo eran.
Lo que les ha dado fama mundial ha sido su conocida epopeya “caminito de Belén a adorar, a adorar al niño que ha nacido ya”. Para dicho viaje fueron necesarios: Un camping gas con su cajita de camisas de recambio, tres cantimploras, dos chubasqueros, una guía de hoteles, abundante ropa de muda, varias latas de conserva, un botiquín de primeros auxilios, tres pares de botas Catiuscas, algunos pajes y tres camellos. Con todo esto y la ayuda desinteresada de una estrella, consiguieron su propósito gracias al mapa de carreteras donado por el Real Automóvil Club de Oriente que fue el sponsor de la Cabalgata.
Cuando se presentaron en el portal de Belén, Melchor llevaba una caja con oro, Baltasar otra repleta de mirra y Gaspar Jordi un paquetito de incienso, porque según sus propias declaraciones “salía bastante económico y lo que importaba era el detalle”. Desde entonces, dependiendo del monarca que haya efectuado el reparto, no es de extrañar que en algunas casas abunden los regalos mientras que en otras solo dejen “detallitos”.
Con los Reyes Magos ha habido lamentables confusiones. La que despertó una mayor polémica fue la cometida por el periodista de origen neozelandés, Aquilino Colibrí, en su artículo “Historia del Melchorismo-II”. En él confunde reiteradamente a sus majestades, los Reyes Magos con los Reyes Maggis, ignorando que estos últimos (de la dinastía Chup-Chup) son de doble caldo. Pero sin duda el error más grave y al mismo tiempo el que tuvo menos importancia, fue protagonizado por el historiador murciano Sir Richard Thomas, quien llegó a llamarles los Reyes Magos de Oriente Express, sin sospechar en su delirio que los camellos no hacen rebajas en días azules. Aprovechamos la ocasión para sacar a la luz, sin pudores ni enmiendas los verdaderos nombres de los camellos: Bernabé, Marcelino y María Luisa.
Y ahora vayamos al grano: ¿De dónde sacan tantos regalos los Reyes Magos? Eso mismo nos preguntamos nosotros. Si alguien puede aportar alguna pista que ayude a la resolución del enigma, se ruega que se ponga en contacto con el detective Peláez en el teléfono 8465 de Avilés.
Fuente: Helicon
Queridos reyes magos:
Si quieren que los siga queriendo a ver si este año si me traen lo que les pido, toca que ustedes hagan ahora los méritos, que llevo medio siglo haciendolos yo... pórtense bien por favor.
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