viernes, 12 de agosto de 2011

Actitud


"La vida es belleza, pena, alegría y confusión; es el árbol, el pájaro y la luz de la luna sobre el agua; es trabajo, dolor y esperanza; es muerte, la búsqueda de la inmortalidad, la creencia en lo Supremo y su negación; es la bondad, el odio, y la envidia; es la codicia y la ambición; es el amor y la falta de él; es la inventiva y el poder para explotar la máquina; es el éxtasis insondable; es la mente, el meditador y la meditación. Es todas las cosas.Pero ¿cómo se enfrentan con la vida nuestras mentes insignificantes, confusas?Eso es lo importante, no la descripción de lo que es la vida.
Todas las preguntas y respuestas dependen de nuestra actitud ante la vida."
-J. Krishnamurti-

martes, 9 de agosto de 2011

Adoro el mar...


Desde hace un poco más de 6 años, tengo la maravillosa fortuna de vivir a lado del mar... y me encanta, el mar me encanta... Puedo durar horas y horas simplemente contémplandolo en silencio, es tan relajante, caminar por la orilla, mojarme los pies, olerlo, sentirlo, escucharlo....

Pero ojo ! Ir a la playa casi no me gusta ! ya sé que suena un poco raro, pero no me gusta mucho no, quizá me he vuelto un poco vampira porque ultimamente huyo mucho del sol, no entiendo a esas personas que cual lagartijas, se pasan las horas en el sol hasta ponerse negras, como aguantarán ? tampoco me gusta eso de ir cargando con toallas, sillas, bronceadores, etc. y pasar más calor que otra cosa en medio de un montón de gente. No me gusta nada la incomodidad, el sol, el calor, la arena que se te mete por todos lados, tampoco me gusta mucho exhibirme en traje de baño. (falta de costumbre, seguro). Pero aun así, aunque sea una o dos horas voy, de vez en cuando voy, simplemente mi marido y yo nos ponemos en la toalla, intentamos aislarnos, hablamos o nos concentramos en el placer de escuchar el sonido del mar, de vez en cuando nos zambullimos, y reconozco que no hay nada mas delicioso, después de un buen rato de sol, meterte en el agua.

Y bueno... ahora me voy a la playa, a ver si con un poco de suerte no quema tanto sol, no hay tanta gente, el mar está tranquilo, no creo que sea mucho pedir.
Y que quede muy claro: Adoro el mar !!!

lunes, 8 de agosto de 2011

Hacer o decir?



Tendríamos que prestar más atención a lo que hacen las personas,
no a las cosas que dicen o lo que parecen.
Es lo que hacen lo que mejor nos habla de ellas.
Las palabras son como suspiros en el aire, pero las acciones son los gestos que nos retratan por dentro y por fuera. Qué poco valor tiene un "te amo" si no va respaldado de actitudes que lo demuestren. De nada sirve un "estoy contigo" si esa persona nunca te hace sentir su compañía.
No lo olvidemos... prestemos la importancia requerida a lo que escuchemos, sin dejar de observar el comportamiendo de quienes nos rodean.
Nos daremos cuenta, que lo esencial es imperceptible al oído y la vista, y solo perceptible para el corazón.










domingo, 7 de agosto de 2011

Despertar


"La mente te utiliza a ti. Inconscientemente, te has identificado con ella, de modo que ni siquiera te das cuenta de que eres su esclavo. Es casi como si fueses poseído sin darte cuenta: crees que la entidad que se posesionó de ti eres tú mismo. La libertad se inicia dándote cuenta de que no eres esa entidad que se posesionó de ti -el pensador- Saber esto te permite observar a la entidad. Apenas comienzas a observar al pensador, comienza a activarse un nivel más alto de consciencia. Comienzas entonces a darte cuenta de que hay un enorme ámbito de inteligencia más allá del pensamiento, y que ese pensamiento es sólo un diminuto aspecto de esa inteligencia. También te das cuenta de que todas las cosas que realmente importan -la belleza, el amor, la creatividad, la alegría, la paz interior- tienen su origen más allá de la mente. Comienzas a despertar".
-Eckhart Tolle-

Amar la imperfección



Las personas que se preocupan en exceso por su imagen tienden a culpabilizar a los demás de cuanto les sucede, mienten y se engañan a sí mismas porque son incapaces de reconocer sus debilidades. Como no quieren asumir su inseguridad, la proyectan en el exterior y la ven reflejada en los demás. Les cuesta aceptar sus errores y tomar conciencia real de sí mismas, por lo que resultan personas difíciles en las relaciones. Sin embargo, nada hay de malo en reconocer que somos humanos, y que en todos nosotros existen en mayor o menor medida las cualidades y defectos propios del ser humano.

Es más, como señaló Oscar Wilde: «No es lo perfecto, sino lo imperfecto lo que precisa de nuestro amor»

No puede sostenerse por mucho tiempo
aquello para lo que nuestra naturaleza no está diseñada.
Tarde o temprano, aquello que tanto sustentamos
desde la ilusión y la mentira, será puesto al descubierto.